Los verdaderos portadores de luz le enseñan a las personas lo que hay en la oscuridad, a aquellos que no tienen el conocimiento de las cosas que han estado en su contra. Hablo de las cosas que la gente oculta. Nada con valor es descubierto en la luz. Los tesoros se encuentran en la oscuridad. La verdad, la mayoría de las personas odian a los portadores de luz porque ellos exponen sus mentiras. La luz los quema, su retórica se vuelve un eslogan vacío que expone a una sociedad llena de mentiras reconfortantes ante las verdades incómodas. Se llaman a sí mismos “portadores de luz”, pero se ofenden fácilmente y se rehúsan a lidiar con la "negatividad" en el mundo. Rodeándose solamente de aquellos que compran el culto de la positividad. Son la nueva era engañada. Ser portador de la luz no se trata de hablar de amor y paz, hacer yoga y ser vegano. Se trata de adentrase en la oscuridad del mundo y sobre todo, en ti mismo. Si tu ser interior está buscando paz en la vida, la luz viene cuando trabajas en transmutar la oscuridad dentro de ti primero, entendiendo y aceptando los términos que vienen con ella. Como varias escuelas antiguas buscaban enseñar, la recapitulación de las experiencias difíciles de nuestra vida, es esencial para comprender el accionar de los "demonios" qué enfrentamos al día a día. "No nos iluminamos fantaseando figuras de luz, si no haciendo consciente lo inconsciente". Carl G. Jung