Imagen de portada
Imagen de perfil
Seguir

Callejera y Subterránea

Escritura y literatura
Buscándote

El Abrazo en el Tango

La abstinencia milonguera es buen momento para escribir sobre algunos temas . Hoy vamos por "El Abrazo en el Tango" - a pedido de Luis. 💌 En lo personal, considero que no te hace falta ni un tango completo para darte cuenta si, entre ese abrazo milonguero querés estar por el resto de la tanda y más o, si por el contrario , te querés mandar a mudar o lo mas recurrente: pasar un buen rato y ya!. ✨ Entrando en terreno de confesiones, me pasa que cada vez ando mas selectiva y , habiendo probado el jamón del medio , ni ganas de comer un bodoque de polenta sin queso . Prefiero esperar y en todo caso alimentar el deseo de ese abrazo que se hace esperar, que cuesta, que no abunda. 💌 Y cómo darte cuenta si has conocido el clímax en cuanto a un abrazo de tango ?; no hay quien te lo cuente. La llamarada arremete. La mano del milonguero sobre tu espalda en ese mismo instante de acercamiento - y hasta antes del mismísimo roce, te diría, es contundente. Aparece conectada sensiblemente al marco musical de lo que suena y entre el espacio compartido se siente como una suave presencia . Como diciendo "acá estoy pero hacé lo que quieras, cuando quieras y como quieras". Entonces, no hay mas que libertad y confianza como respuesta, mas la música que te succiona y te vuela la cabeza. Y todo va y va y la técnica aprendida en cuanto a pasos se trasciende. ✨ En ámbito de milonga ,yo al menos, abrazo según el milonguero y hoy por hoy supongo que elijo y me eligen quienes andan en similar frecuencia. Una también , con tanta noche entre ojeras, ha aprendido a ingeniárselas como para más allá de un aparente no muy amable encuentro , sacar ganancia y no es tan complicado no sentirse cómoda aún sin revoloteo de mariposas. 💌 Porque, cada quien inmerso en su tango y en su pretensión de conectarse con otro ser bajo el estímulo sonoro es único y , por mas añares que llevemos milongueando , los encuentros intensos me parece suceden , contados... 🦋 Sin embargo, si ya lo hemos probado, si sabemos de qué hablamos cuando invidentes de ojos , nos hallamos abiertos o abiertas en medio de una historia amorosamente íntima a la cual correspondemos siendo parte de la honestidad más punzante , podremos entonces , saber lo que encierra ese "abrazo milonguero" : Ese abrazo a punto del derrumbe . Ese derrumbe que solo compone , con algo de resaca dolorida , el desapego. Romperse en mil pedazos; rehacerse entre otro abrazo. Buscarlo y no buscarlo. O atajarlo...o esquivarlo...o vivirlo intensamente si es que aparece. Ya sabemos lo que viene: la posible intimidad, el gustito del deseo, la pasión por otro cuerpo bien parado y destrozado y pegado tan pegado a tu despojo inundado de nada... de todo...Después, ( y sí que importa del después!): inminente desencuentro y no atreverse a pedir más, a decirle que lo amás...Y cortar, enfriar, jugar a sostener y hasta dispuesta a posar , a perder...a irte vacía...con ganas de desaparecer... Porque el marco social de la milonga es rarito y necesario. Huele a vidrio, a azulejo, a frialdad . Y , ese afuera del cual renegás, te interesa... Porque te permite cuidarte y de pronto distanciarte . Ese afuera de códigos que no te dejan ser tan tormenta como para terminar agarrando el taco y tajearte la cabeza y morirte desangrada en una pista milonguera. .
Ver más

Debes ser mayor de 18 años para ver este contenido