Este año lo comencé releyendo Carmilla de Sheridan le Fanu. No tenía la cabeza para textos largos y estaba de ánimo para un clásico. En esa conjunción de astros me regalaron para fin de año una copia en físico con motivos de la fiesta, ninguna otra que mi tía que me conoce y sabe que amo los vampiros. (Gracias 🫂 tía) Releer está obra me permitió ahondar en reflexiones tales como: ¡Que brillante que LA VAMPIRO más famosa sea MUJER y LESBIANA! (Considerando con todo que es anterior a Drácula de Bram Stoker) Pero esto no es una mera cuestión accidental, es un suceso canónico que nos permitió darnos cuenta que para los hombres, la otredad que hay que destruir es ni más ni menos que una mujer que se comporta como el, (y que acosa jovencitas). El monstruo 💀 del que los padres tienen que proteger a sus hijas es una muchacha que se hospeda dentro del mismo hogar. La historia de amor trágico entre Laura y Carmilla karnstein (pues ella si tiene nombre y apellido) es de una perfecta convergencia de lo sutil, que planta la idea de que detrás de una amistad femenina puede haber algo más y sobre todo algo terrorífico que los hombres deben destruir. Es común ver en la literatura como las mujeres son representadas como seductoras, pero ¿Eso es lo mismo cuando el objeto de la seducción son las muchachas? Para los personajes masculinos de la obra esto es monstruoso y representa el terror mas abyecto. Carmilla debe ser destruida y sin embargo mis pensamientos se quedan con Laura, que todavía espera los pasos de su "amiga" detrás de la puerta. Los invito a escuchar los episodios de Muérdeme! Sobre Carmilla y The hunger