La Gran Invocación es una plegaria traducida a más de 75 idiomas. Es un instrumento de poder para ayudar a que tenga plena expresión el Plan de Dios en la Tierra. Emplearla es un acto de servicio a la Humanidad y al Cristo. ¿En qué consiste la Gran Invocación? Es una plegaría o mantra que expresa verdades esenciales que la mayoría de la humanidad acepta normalmente, en mayor o menor grado de una manera innata y existencial: Existe una inteligencia básica, cuyo reflejo es el orden que impera en la naturaleza y el universo que nos rodea. A esta inteligencia inherente a todo el universo observable la llamamos Dios, Ser Supremo, Energía Universal, etc… Existe un Plan Divino evolutivo en el universo, que todo lo relaciona y sincroniza y cuyo poder motivador es el amor. Un reflejo de este infinito amor es nuestra capacidad de amar; ya sea por las personas o por las cosas, por los ideales o por cualquier tipo de convicción que rige nuestras vidas. Que en la historia de la humanidad ha habido grandes personalidades en todas las épocas y culturas del planeta, que han personificado en si mismas el Amor. Sus vidas han servido de ejemplo para que los demás pudiéramos comprender mejor el potencial humano. Han ayudado a crecer ética, moral y espiritualmente a nuestra civilización y la huella que han dejado ha matizado y modulado nuestra sociedad época tras época. Algunos ejemplos más populares de estos Grandes Maestros o Instructores son Cristo, Buda, Krishna, Mahoma, etc. El trasfondo de su mensaje es el mismo en todos ellos. Que únicamente a través de la humanidad puede llevarse a cabo el Plan Divino y mejorar nuestras propias condiciones de vida particular y globalmente. Dicho esto es importante saber que La Gran Invocación no pertenece a religión, sector o grupo alguno. Es un regalo hecho a la humanidad para su propio desarrollo y liberación. Todas aquellas personas de buena voluntad que quieran prestar un servicio Mundial pueden usarla.