700 mil niños, niñas y adolescentes sufren violencia física en Argentina. El estado solo llega a un 2% de esos casos. El resto de los niños, las niñas y los adolescentes están desprotegidos. Las consecuencias de la violencia son graves. Implica un mayor riesgo de dejar la escuela, y de experimentar problemas de salud mental y enfermedades no comunicables. Con Abrazar podemos detectar prevenir la violencia.