Hay tantas películas que es casi inevitable encontrar paralelismos entre ellas. Además hay múltiples "homenajes", que muchas veces son robos descarados disfrazados de tal cosa para disimular, pero otras son auténticas referencias hechas en modo de agradecimiento o para expresar admiración por alguna película anterior. "El teléfono negro" es una historia que mezcla el suspenso con el terror, y con varias referencias voluntarias o no a otras películas, entre las que están las que nombré en el título. Veamos. En 1978, cerca de Denver, se están produciendo misteriosas desapariciones de adolescentes. La policía no tiene pistas, pero los jóvenes raptados viven todos alrededor de un área determinada y pertenecen al mismo grupo de amigos. Los dos protagonistas son los hermanos Finney y Gwendolyn (Mason Thames y Madeleine McGraw respectivamente). El primero, un chico que sufre el acoso de otros chicos más violentos en la escuela, y ella, algo menor que su hermano, comienza con una serie de sueños premonitorios que podrían ayudar a la investigación. Cuando el propio Finney sea víctima de secuestro, todo se volverá más vertiginoso, y podremos finalmente conocer más sobre lo que ocurre. El secuestrador es un hombre con una máscara, conocido como El Raptor (Ethan Hawke), de quien nunca sabemos su nombre, el cual retiene a sus víctimas en un sótano insonorizado antes de matarlas. Encerrado en ese lugar, Finney cuenta con la inesperada ayuda de sus amigos asesinados, los que se comunican a través de un teléfono desconectado que se encuentra allí. Mediante esas llamadas estos espíritus le van dando pistas para ayudarlo a escapar. Durante buena parte de la película se mantiene un clima tenso, con un par de sustos repentinos ayudados por los efectos de sonido que pueden provocar algún que otro salto. Respecto a lo que dije al comienzo, cuando uno ha visto algunas películas se vuelve casi imposible no encontrar semejanzas entre ellas. Así por ejemplo tenemos sueños premonitorios, un secuestrador enmascarado y espíritus de víctimas anteriores que tratan de ayudar al protagonista. Todo eso lo puedo relacionar con las películas que nombré en el título. A "Dragón Rojo" recuerda el hecho de que el secuestrador considera que no es él quien comete estos hechos, sino otra persona o fuerza superior de quien también él es víctima. De Freddy, los sueños, parte importante de la trama, y de El Sexto Sentido el hecho de que estos fantasmas no son malvados, sino que intentan evitar que el joven Finney termine muerto también. Cerca del final otra escena recuerda a "Misery", pero bueno, quién sabe. Lo cierto es que todo esto se enmarca dentro de una película de suspenso y misterio que logra mantener en vilo al espectador durante buena parte de la misma.