El desarrollo de una enfermedad autoinmune es un proceso difícil de predecir, lo que genera una situación de indefensión y ansiedad endógena que lastra nuestra salud no obstante, no todo es blanco o negro, y ni mucho menos debemos vivirlo con esa angustia vital De donde viene una enfermedad autoinmune? • Predisposición genetica e historia familia de autoinmunidad son las primeras pistas a indagar. Si sabemos qué talón de Aquiles tenemos le podremos poner talonera mucho mejor. • Infecciones crónicas, algunas evidentes (pylori, uretritis, gingivitis) y otras ocultas (parásitos, virus herpes, bacterias intracelulares). En cualquier caso estamos vivos, somos un holobionte de gérmenes e interaccionamos con el ambiente. Mejorar nuestra microbiota y reducir inflamación será fundamental. • En este proceso se produce la molecular mimicry (que es básicamente similitud entre partes de los patógenos y estructuras endógenas) y el reconocimiento anómalo de lo propio como si fuera algo que se debiera destruir. • Intolerancias alimentarias o inflamación intestinal capaz de hacer una disrupción muy importante de nuestras barreras mucosas filtrándose gérmenes, toxinas y dejándonos deficitarios de nutrientes esenciales para proteger nuestra inmunidad • Disfunción inmune como principal causa de autoinmunidad en la que observamos que no se han depurado linfocitos auto reactivos o se ha generado un agotamiento de nuestras defensas. Esto es un proceso complejo desde pequeños (inicialmente controlado por el timo) donde hemos de conocer qué pasos limitantes tiene un linfocito para quedar ensamblado como linfocito de memoria auto reactivos. Siempre es capital tener en buen rango los linfocitos T reguladores y una correcta ratio de Th1/Th2. Toda inflamación de fondo impactará negativamente sobre ello. • Balance hormonal que cause activación y debilitamiento de nuestra inmunidad. Básico conocer como el eje del estres o nuestra tiroides han de estar sanas Enrique Esteve https://www.instagram.com/p/C4kYFQNNPWG/