Voy a ser yo.Esperanza está sentada en un banco de la plaza con su vestido azul con flores amarillas, lleva sus sandalias azules con tiritas a tono con el vestido. Siempre le gusta combinar así, aunque los demás digan que no queda bien. Tiene su celular en una mano y en la otra una flor violeta. Mira la hora en el teléfono; las 16:00. Se distrae mirando la gente pasar y los autos. Vuelve a ver la hora; las 17:00. Se levanta del banco, deja caer la flor de su mano como intentando retenerla, como intentando retener algo que se ha ido. Comienza a andar. Julian ve como la flor cae al suelo, se aproxima hasta ella, la toma y trata de alcanzar a Esperanza. -Disculpa-. le dice tocándole el hombro.- Se te cayó esto. Esperanza tarda en reaccionar, observa la flor que acaba de soltar en las manos de aquel chico. -Gracias.- responde. Para qué explicar que esa flor era un símbolo de su relación con Manuel, para qué decirle que no quería seguir cargando una flor violeta, ya no más. Decidió tomarla, callada, y siguió andando, no sabía bien a dónde iba y no le interesaba tampoco. Miró su celular una vez más; las 20:00, ninguna notificación, nada que la detenga, que la hiciera volver al banco de la plaza. Apagó el teléfono, en ese momento se dió cuenta que estaba apretando demasiado la flor, abrió la mano pero era tarde, solo quedaba apenas un pétalo achucharrado de todo lo que era. Cerró los ojos en medio de la playa solitaria y se dijo “mañana voy a estar bien, voy a ser yo”.Ver más
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