Imagen de portadaImagen de perfil

Diego Cristaldo

Escritura y literatura
Invitame un Cafecito

Amor en tiempos de barbijos

Cargando imagen
-¿Ya te vas?- preguntó ella tomándole la mano. -Sí, tengo que irme a trabajar- respondió él cortantemente. -No vayas- dijo ella mirándole tiernamente a los ojos. -No puedo quedarme- le dijo él sonriendo- me necesitan. -Yo también te necesito, quédate- le dijo ella. -¿Y quién va a pagar las cuentas? ¿Cómo vamos a comprar comida?- le dijo él con la voz esta vez más firme. -Igual, quédate- le dijo ella frunciendo el ceño. -No, me tengo que ir- le dijo él mientras intentaba que le soltara la mano- tengo que cuidar a las abuelitas. -Bueno, pero solo porque las abuelitas son muy lindas- le dijo ella sin dejar de soltarle la mano- ¿Y a mí quien me va a cuidar? -Para eso está Terry- él señaló a un pequeño perrito que estaba acostado en un almohadón, este al escuchar su nombre comenzó a mover su cola de emoción. -Ven aquí Terry- dijo ella soltándole la mano y alzó al perro que jadeaba contento-¿Cómo está la abuela Marcia? -¿La abuela Marcia?- él hizo una pausa incomoda y miró hacia un costado con tristeza-bien, la abuela Marcia está bien. -Bueno- dijo ella sin querer preguntar más. -Me tengo que ir- dijo él -Si está bien- dijo ella sin oponerse esta vez. -Adiós, te quiero- le dijo él. -¿Llevas barbijo?-preguntó ella. -Sí, lo tengo- respondió él. -¿Y el alcohol?-preguntó ella. -Sí, lo tengo- respondió él. -Cuídate- le dijo ella. -Sí, si- le dijo él. -Te quiero- le dijo ella. -Yo también- le respondió él. -Chau- dijo ella. -Chau-dijo él y cerró la puerta para irse a trabajar en el hospital. FIN
Ver más