El contenido a publicar debe seguir las normas de contenido caso contrario se procederá a eliminar y suspender la cuenta.
¿Quiénes pueden ver este post?
Selecciona los planes que van a tener acceso
🌒 Lo que no debía sentir – Parte 1: El encuentro
Cargando imagen
Nunca pensé que volver a verlo iba a removerme tanto.
Habían pasado años, tal vez demasiados, y sin embargo, bastó con cruzar su mirada en ese lugar lleno de gente para que todo lo demás desapareciera. El ruido, las voces, el mundo. Solo él y yo, como si nunca nos hubiésemos soltado.
Se acercó con la misma sonrisa de siempre, aunque ahora había algo diferente en sus ojos… una mezcla de nostalgia, culpa y deseo contenido. Supongo que yo también tenía esa expresión, la que se forma cuando el cuerpo recuerda lo que la mente juró enterrar.
Hablamos de cosas banales: trabajo, viajes, lo de siempre. Pero cada palabra que salía de su boca tenía otro peso, otro ritmo. Como si cada frase escondiera un “¿te acordás?” no dicho. Y claro que me acordaba.
Lo que habíamos vivido no era para contarlo. Era de esas historias que se susurran, que no se admiten en voz alta. Lo nuestro no debía haber pasado… y sin embargo, ahí estábamos, mirándonos como si el tiempo no hubiera hecho nada por separarnos.
Cuando me rozó el brazo al despedirse, fue como una corriente que recorrió mi piel entera. El roce fue mínimo, pero el efecto fue devastador.
Me quedé parada, quieta, sintiendo cómo se agitaba mi respiración sin que pudiera controlarla. Queriendo volver atrás, al instante justo antes de que se alejara.
Él no miró hacia atrás. Pero yo sé que sintió lo mismo.
Porque hay cosas que el tiempo no puede borrar. Y hay encuentros que no se planean… simplemente, ocurren.
Y cuando lo prohibido vuelve a tocar la puerta, es difícil ignorarlo.
“No sabía si volveríamos a vernos… pero algo en mí ya había vuelto a él.”
Ver más
Compartir
Creando imagen...
¿Estás seguro que quieres borrar este post?
Debes iniciar sesión o registrarte para comprar un plan