La Cueva de Chauvet es una revista de análisis y crítica cinematográfica que apunta a un público que junte dos intereses: la lectura y el cine. No apelamos a un lector que deba saber sobre determinados temas, como pueden ser la historia o la teoría del cine, ni tampoco saberes filosóficos o humanísticos; simplemente que posea la curiosidad necesaria para ver y pensar las películas.
No nos encolumnamos, como revista, en ningún movimiento ni tradición fílmica en particular, no porque no tengamos intereses ni preferencias por una u otra escuela cinematográfica, sino porque no reivindicamos ninguna en particular como colectivo editorial. Cada escriba posee sus propias preferencias y las vuelca en las notas que comparte en nuestra publicación. Creemos que la riqueza del espacio está en la diversidad de puntos de vista y gustos estéticos. Creemos, también, que una de las características del cine —como del arte en general— es que abre el juego a la disidencia, a la diversidad de gustos y criterios. En este sentido, uno de los pilares de nuestro trabajo es pensar estrategias para el debate sano de ideas.
La segunda tarea que nos proponemos —porque hay que decir también que los escribas de La Cueva de Chauvet provienen de diversas formaciones intelectuales y académicas— es brindar un marco colaborativo para los distintos enfoques teóricos sobre el cine. Si bien la revista aborda películas y las critica con herramientas del análisis convencional de cine, es decir analizando aspectos técnico-formales, nunca se desentiende de los análisis que podríamos llamar sociales. Las notas, por más que se circunscriban a una única película, analizan los temas de los que tratan, las implicancias de esos tratamientos y las preguntas de carácter filosófico que esas películas abren.